Si te criaste en el sur, seguramente comiste estas papas varias veces al mes. ¡Hoy en día, todavía es un plato que anhelo!
Ingredientes:
7 papas peladas y cortadas en cubos
3 cucharadas de mantequilla
1 pizca de hojuelas de cebolla
2 cucharadas de harina
½ taza de leche
½ taza de agua
Sal y pimienta al gusto
2 cucharadas de grasa de tocino (opcional)
Instrucciones:
1. Coloque las papas peladas y cortadas en cubos en una olla. Llene la olla con agua hasta que esté aproximadamente a 2 pulgadas por encima de las papas.
2. Lleve el agua a hervir. Cocine las papas hasta que estén tiernas pero no se deshagan. Reduzca el fuego a bajo.
3. En un recipiente aparte, mezcle la harina y media taza de agua hasta que la harina se disuelva.
4. Agregue gradualmente la mezcla de harina disuelta a la olla con las papas, revolviendo constantemente. Deje que hierva a fuego lento brevemente para espesar. Ajuste el espesor agregando más harina para espesar o más agua para una consistencia más líquida.
5. Sazone la mezcla con leche, sal, pimienta, hojuelas de cebolla y mantequilla o grasa de tocino (opcional) al gusto.
Disfrute de las reconfortantes y sabrosas papas guisadas sureñas acompañadas de pan de maíz, col rizada o una ensalada refrescante para una comida sureña completa y satisfactoria. Este plato es perfecto para reuniones o como una deliciosa guarnición para complementar su plato principal favorito.
