Rollo de calabaza con glaseado de queso crema

Paso 1: Prepara el pastel
Precalienta tu horno a 190°F (375°C). Cubra un molde para pasteles enrollado de 15 x 10 pulgadas con papel pergamino y engrase ligeramente.
En un tazón mediano, mezcle la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio, la canela, la nuez moscada, el jengibre y la sal.
En un tazón grande, bata los huevos y el azúcar granulada con una batidora eléctrica a alta velocidad durante 5 minutos, hasta que estén espesos y de color claro. Agregue el puré de calabaza y el extracto de vainilla, revolviendo hasta que estén bien combinados.
Incorpore gradualmente la mezcla de harina a la mezcla de calabaza hasta que esté bien combinada.

Divida la masa uniformemente en la fuente para hornear preparada y hornee en el horno durante 13-15 minutos, o hasta que el pastel regrese cuando se toque ligeramente.
Mientras el bizcocho aún está caliente, espolvorea generosamente un paño de cocina limpio con azúcar en polvo. Dale la vuelta con cuidado al bizcocho sobre la servilleta y retira el papel pergamino. Comenzando por uno de los extremos cortos, enrolle el pastel y la toalla juntos. Deje que se enfríe por completo.
Paso 2: Prepara el glaseado de
queso crema En un tazón grande, bata los ablandadores de queso crema, la mantequilla y el extracto de vainilla hasta que quede suave y cremoso.
Agrega el azúcar glas poco a poco, batiendo hasta que la mezcla esté homogénea y suave.
Paso 3: Ensamble el rollo de calabaza
Desenrolle con cuidado el pastel enfriado y extienda el glaseado de queso crema de manera uniforme sobre la superficie.
Enrolle suavemente el bizcocho sin retorcerlo, teniendo cuidado de mantenerlo tenso pero no demasiado apretado para evitar grietas.
Envuelva el rollo de calabaza en una envoltura de plástico y refrigere durante al menos 1 hora antes de servir.
Paso 4: Servir
Espolvorea el rollo de calabaza con azúcar en polvo antes de cortarlo.
Sirva frío o a temperatura ambiente para un delicioso postre festivo.
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