La albahaca es una de las plantas aromáticas más utilizadas en la cocina. Es fácil de cultivar; sin embargo, cuando compramos una planta en el supermercado, casi siempre muere después de unas semanas, a veces después de unos días.
Las plantas de albahaca requieren unas 8 horas de sol al día, un suelo bien drenado y suficiente espacio para la circulación del aire. Sin embargo, estos cuidados básicos pueden no ser suficientes para una planta comprada en el supermercado.
La principal razón por la que este tipo de planta muere poco después de traerla a casa se debe a un choque térmico y ambiental repentino. En el supermercado, las plantas están expuestas a poca luz artificial y a una temperatura controlada. En casa, sin embargo, están expuestas a la luz natural.
En realidad puede haber más de una causa y a continuación las enumeramos todas, junto con soluciones para que tu planta de albahaca dure el mayor tiempo posible.
Fusariosis de las plantas