Pollo frito
1. Prepare el pollo: enjuague los trozos de pollo y séquelos. Si lo desea, sazone ligeramente con sal.
2. Prepare la mezcla húmeda y seca: en un bol, combine la leche con los huevos batidos. En otro bol, mezcle la harina, la pimienta negra, el ajo en polvo y cualquier condimento adicional que prefiera.
3. Cubre el pollo: sumerge cada trozo de pollo en la mezcla de huevo, dejando que escurra el exceso. Luego, cúbrelo con la mezcla de harina sazonada, presionando suavemente para asegurar la adherencia.
4. Doble inmersión opcional para lograr un acabado más crujiente: para lograr un recubrimiento aún más crujiente, sumerja cada pieza cubierta con harina nuevamente en la mezcla de huevo y luego cubra nuevamente con la mezcla de harina.
5. Freír el pollo: Calentar aproximadamente 1 a 2 pulgadas de aceite en una sartén grande a fuego medio-alto hasta que alcance los 350 °F (o hasta que una pizca de harina chisporrotee al entrar en contacto con el aceite). Freír el pollo en tandas durante aproximadamente 7 a 10 minutos por lado, o hasta que esté dorado y bien cocido, con una temperatura interna de 165 °F.
6. Escurrir y servir: Retire los trozos de pollo del aceite y colóquelos en un plato cubierto con toallas de papel para absorber el exceso de aceite.
Sirva caliente con su salsa preferida o guarniciones. ¡Disfrute!