Introducción
El pollo a la crema es uno de esos platos que nunca pasan de moda. Su suavidad, su textura reconfortante y su sabor intenso lo convierten en una receta ideal tanto para una comida diaria como para una cena especial. Se trata de trozos de pollo cocidos a fuego lento en una salsa cremosa y especiada que se puede acompañar perfectamente con arroz, pasta, puré de papas o incluso pan crujiente.
Este platillo es versátil y admite múltiples variaciones: puedes enriquecerlo con champiñones, pimientos, espinacas, queso, o aromatizarlo con ajo, mostaza o hierbas frescas. La base siempre será la misma: una crema suave, bien equilibrada, que abrace el pollo con un toque de elegancia y confort.
Además, es muy fácil de preparar y no requiere técnicas avanzadas ni ingredientes complicados. Si buscas un plato cremoso, sabroso y rendidor, el pollo a la crema es la opción perfecta.
Ingredientes
500 g de pechugas de pollo (sin hueso, en tiras o cubos)
1 taza de crema de leche (nata para cocinar)
1/2 taza de leche (puede ser entera o vegetal)
2 cucharadas de mantequilla o aceite de oliva
1 diente de ajo picado finamente
1/2 cebolla mediana picada
1 cucharada de harina (opcional para espesar)
Sal y pimienta al gusto
1/2 cucharadita de nuez moscada (opcional)
1 cucharadita de caldo concentrado o cubito disuelto (pollo o verduras)
Perejil fresco picado para decorar
Opcionales:
1 taza de champiñones en láminas
1/2 taza de queso rallado (tipo parmesano o mozzarella)
1 cucharada de mostaza
1 cucharadita de paprika
Preparación