Preparación Paso a Paso
1️⃣ Preparar el bizcocho:
Precalienta el horno: Antes de empezar, enciende tu horno a 180 °C (350 °F). Engrasa un molde rectangular de unos 20×30 cm y cúbrelo con papel encerado para facilitar el desmolde.
Bate las claras a punto de nieve: Coloca las claras en un bol grande y bate a velocidad alta hasta que formen picos suaves. Añade poco a poco el azúcar, sin dejar de batir, hasta que las claras estén brillantes y firmes.
Incorpora las yemas: Agrega las yemas una a una, batiendo suavemente después de cada adición. Esto ayudará a que la mezcla mantenga su volumen.
Integra los ingredientes secos: Tamiza la harina, el polvo de hornear y la pizca de sal. Incorpóralos poco a poco a la mezcla de huevos, usando movimientos envolventes con una espátula. Por último, añade la esencia de vainilla.
Hornea el bizcocho: Vierte la mezcla en el molde preparado y hornea durante 25-30 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro, salga limpio. Deja enfriar por completo antes de continuar.
2️⃣ Preparar la mezcla tres leches:
En un bol grande, combina la leche evaporada, la leche condensada y la crema de leche. Si te gusta el aroma a vainilla, añade una cucharadita de esencia.
Pincha el bizcocho: Usa un tenedor o palillo para hacer pequeños agujeros en toda la superficie del bizcocho. Esto permitirá que la mezcla se absorba mejor.
Empapa el bizcocho: Vierte la mezcla de leches uniformemente sobre el bizcocho, asegurándote de cubrir cada rincón. Déjalo reposar para que absorba toda esa deliciosa humedad.
3️⃣ Preparar la crema chantilly:
Bate la crema: Coloca la crema para batir en un bol frío y bate a velocidad alta. Cuando comience a espesar, añade el azúcar glas y la esencia de vainilla. Continúa batiendo hasta obtener picos suaves y firmes.
Cubre el pastel: Extiende la crema chantilly sobre el bizcocho ya empapado, cubriendo toda la superficie.
4️⃣ Decora y refrigera:
Decoración final: Si lo deseas, añade frutas frescas como fresas, duraznos en almíbar o ralladura de chocolate. ¡Deja volar tu creatividad!
Refrigera: Lleva el pastel al refrigerador durante al menos 4 horas, o mejor aún, déjalo reposar toda la noche. Esto intensificará los sabores y hará que el bizcocho esté aún más delicioso.
¡Hora de Disfrutar!
Sirve tu Pastel Tres Leches bien frío y observa cómo todos se derriten con cada bocado. Cada pedazo está lleno de esponjosidad, dulzura y esa frescura inigualable de las tres leches. Este clásico nunca falla y siempre deja recuerdos inolvidables.
¿Listo para conquistar con tu talento en la cocina? ¡Déjanos saber cómo te quedó y compártelo con tus seres queridos!