Introducción
La leche condensada es un ingrediente esencial en muchas recetas de postres, pero ¿sabías que puedes prepararla fácilmente en casa? Con solo 4 ingredientes y unos pocos minutos, obtendrás una leche condensada cremosa y deliciosa que nada tiene que envidiar a la comercial. Ideal para endulzar tus recetas favoritas o disfrutarla sola.
Ingredientes
1 taza (240 ml) de leche entera
1 taza (200 g) de azúcar
2 cucharadas de mantequilla
1/4 de cucharadita de bicarbonato de sodio
Sugerencia de preparación
1. Preparar los ingredientes:
Asegúrate de tener todos los ingredientes medidos y listos para usar.
2. Cocción de la mezcla:
En una cacerola a fuego medio-bajo, combina la leche y el azúcar. Remueve constantemente hasta que el azúcar se disuelva por completo.
3. Agregar la mantequilla:
Una vez que la mezcla comience a calentarse, añade la mantequilla y sigue removiendo para evitar que se pegue al fondo.
4. Incorporar el bicarbonato:
Agrega el bicarbonato de sodio. Esto ayudará a que la mezcla adquiera una textura más cremosa y evitará que se cristalice.
5. Cocinar y espesar:
Cocina a fuego bajo, removiendo constantemente, durante 10-15 minutos o hasta que la mezcla espese y adquiera el color característico de la leche condensada.
6. Enfriar:
Retira del fuego y deja enfriar. Al enfriarse, la leche condensada se espesará aún más.
Consejos para servir y almacenar