He aquí por qué quieres colgar una bolsa de malla con cáscaras de huevo en tu jardín

El concepto de jardinería orgánica y sostenible se está volviendo cada vez más popular a medida que más personas buscan minimizar su impacto ambiental y al mismo tiempo maximizar la salud y la productividad de su jardín. Incorporar prácticas naturales y ecológicas puede ser eficaz y gratificante. Una de esas prácticas implica utilizar un producto de desecho de cocina aparentemente común: cáscaras de huevo. El simple hecho de colgar una bolsa de malla con cáscaras de huevo en su jardín puede ofrecer una variedad de beneficios que quizás no haya considerado.

¿Intrigado? Usted debería ser. Este artículo profundiza en por qué esta práctica está ganando terreno tanto entre los jardineros experimentados como entre los principiantes. Desde el enriquecimiento de nutrientes hasta el control de plagas, las razones pueden sorprenderle. Continúe leyendo para descubrir cómo puede aprovechar este pequeño truco de jardín para mejorar la salud y la productividad de su jardín.

La cáscara de huevo es rica en calcio, un nutriente vital para las plantas. A medida que las cáscaras de huevo se descomponen, liberan lentamente calcio, lo que ayuda a fortalecer las paredes celulares de las plantas. Esto puede dar como resultado plantas más resistentes y cosechas más abundantes.

Las cáscaras de huevo trituradas pueden servir como un elemento disuasorio natural para plagas como babosas y caracoles. Los bordes afilados de las cáscaras trituradas pueden disuadir a estas plagas de cuerpo blando de atacar sus plantas, proporcionando un método de protección libre de químicos.