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El alimento más mortal del mundo mata a 200 personas al año

3. Carambola: Neurotoxinas

La carambola contiene neurotoxinas inofensivas para la mayoría de las personas, pero mortales para quienes padecen enfermedad renal. En las personas afectadas, la toxina se acumula, provocando convulsiones, confusión e incluso la muerte. Los síntomas pueden aparecer en cuestión de horas, comenzando con hipo, vómitos o debilidad. Si sus riñones están sanos, la carambola es completamente segura para comer. Esta fruta, que parece una estrella amarilla de cinco puntas, es muy apreciada por su sabor agridulce y su alto contenido de vitamina C. WebMD explica que la fruta es rica en antioxidantes, lo que la convierte en un excelente antiinflamatorio, y potasio, “que reduce el riesgo de sufrir un ataque cardíaco o un derrame cerebral”.

4. Huesos de cereza y semillas de manzana: cianuro

Los huesos de cereza y las semillas de manzana contienen amigdalina, un compuesto que se convierte en cianuro al triturarse o masticarse. En grandes cantidades, puede causar mareos, náuseas, problemas respiratorios e incluso la muerte. Si bien la fruta en sí es segura, los huesos nunca deben triturarse ni consumirse. Tragar un hueso de cereza entero no es perjudicial, pero al abrirlo se liberan toxinas.

5. Guarnición tóxica: patatas verdes

Cuando las papas verdes se exponen a la luz, producen clorofila, que es completamente inofensiva. Sin embargo, Healthline advierte que “también puede estimular la producción de ciertos compuestos”, como la solanina, que “puede ser tóxica para los humanos en dosis altas. Sin embargo, los informes de enfermedades graves son poco frecuentes”. Consumir demasiada cantidad puede incluso provocar parálisis o coma. Sin embargo, las papas verdes son seguras si se pelan correctamente. Deseche las que presenten un tinte verde o brotes para evitar la toxicidad.

6. Anacardos crudos: Urushiol

Los anacardos crudos contienen urushiol, la misma toxina presente en la hiedra venenosa y el roble venenoso. “Si manipulara o consumiera anacardos crudos, probablemente experimentaría una reacción similar a la causada por la hiedra venenosa, como una erupción cutánea con picazón e inflamación que puede causar ardor”, escribe Healthline. Sin embargo, los anacardos etiquetados como crudos en el supermercado han sido descascarados y tratados térmicamente para eliminar cualquier residuo de urushiol, lo que los hace seguros. Nota: La piel del mango también contiene urushiol.

 

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