3. Cocinar a fuego lento: Reduce el fuego a bajo y continúa cocinando la mezcla durante 1 a 1.5 horas, removiendo con frecuencia para evitar que se pegue. A medida que cocinas, notarás que la mezcla se espesa y toma una textura similar a la del dulce de leche, pero un poco más firme.
4. Probar la consistencia: Para saber cuándo está lista para formar las tabletas, realiza la prueba de la “bola de agua”. Toma una pequeña cantidad de la mezcla y colócala en un vaso con agua fría. Si puedes formar una bolita que se mantenga firme al sacarla del agua, es hora de retirar del fuego.
5. Formar las tabletas: Vierte la mezcla en un molde rectangular o cuadrado previamente enmantecado o forrado con papel manteca. Alisa la superficie con una espátula.
6. Enfriar y cortar: Deja enfriar la mezcla a temperatura ambiente durante varias horas, o hasta que esté completamente firme. Una vez enfriada, corta en porciones pequeñas o en forma de tabletas.
7. Almacenamiento: Guarda las tabletas de dulce de leche en un recipiente hermético, a temperatura ambiente o en el refrigerador, dependiendo de tu preferencia.