Los huevos no solo son asequibles, sino que también están repletos de nutrientes esenciales que favorecen la salud general. Son una fuente inagotable de proteínas, vitaminas y minerales, que aportan diversos beneficios, como la reparación muscular, la salud ocular y nutrientes importantes como la vitamina D, las vitaminas del complejo B y la colina.
Pero a menudo nos preocupa la corta vida útil de los huevos, lo que genera inquietud sobre su deterioro. Si bien guardarlos en el refrigerador puede ayudar a prolongar su frescura, ¡existe un método sorprendente y práctico que puede mantenerlos frescos hasta por un año entero! Y es perfecto para quienes solemos olvidarnos de ellos.
Así es, ¡puedes congelar óvulos! Congelar óvulos es un método menos conocido, pero muy eficaz para conservar su frescura durante un largo periodo. Esta técnica no solo reduce el desperdicio de alimentos, sino que también garantiza que siempre tengas óvulos a mano cuando los necesites.
Sin embargo, congelar óvulos requiere cierta preparación para mantener su calidad y sabor. No se pueden simplemente congelar los huevos enteros, ya que el líquido dentro de la cáscara se expandirá, provocando que se agrieten y se echen a perder. A continuación, se explica cómo congelar óvulos correctamente:
Congelación de huevos enteros
Si quieres congelar huevos enteros, el proceso es sencillo. Rompe los huevos y bate las claras con las yemas. Luego, vierte la mezcla en un recipiente o cubitera apto para congelar. Etiqueta el recipiente con la fecha para llevar un registro del tiempo que llevan congelados. También es útil dividir los huevos en porciones según su uso futuro, como huevos revueltos.
Congelación de yemas y claras separadas
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