Coloque el pollo crudo en una fuente para hornear. En 4 sencillos pasos, tendrás una comida celestial
Preparación
Precalienta tu horno a 375°F (190°C). Extienda la salsa marinara uniformemente en el fondo de una fuente para hornear de 8×8.
Coloque una capa de queso mozzarella sobre la salsa y luego espolvoree la albahaca picada uniformemente encima.
Sazone ambos lados de las pechugas de pollo con sal y pimienta al gusto. Colóquelos uniformemente en la fuente para hornear encima de la mozzarella y la albahaca.
En un tazón, combine el pan rallado panko, el queso parmesano rallado, el perejil y el orégano seco. Espolvorea esta mezcla uniformemente sobre las pechugas de pollo en la fuente para hornear.
Hornee en el horno precalentado durante aproximadamente 1 hora, o hasta que el pollo esté bien cocido y la cobertura esté dorada y crujiente.