Modo de Preparación Paso a Paso
Paso 1: Prepara el horno
Precalienta tu horno a 180 °C (350 °F) y engrasa una fuente para hornear con mantequilla o aceite.
Paso 2: Saltea las verduras
En una sartén grande, calienta un chorrito de aceite de oliva y sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén transparentes.
Agrega las zanahorias, calabacita, papa, brócoli, coliflor y elote.
Saltea por 5-7 minutos sin cocer completamente, ya que se terminarán en el horno.
Paso 3: Prepara la salsa blanca
En otra sartén, derrite la mantequilla, añade la harina y remueve por 1 minuto para formar un roux.
Incorpora poco a poco la leche y la crema, batiendo hasta que espese.
Sazona con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada.
Paso 4: Monta la cazuela
Coloca las verduras salteadas en la fuente para hornear.
Vierte la salsa blanca por encima y mezcla ligeramente para que todas las verduras queden cubiertas.
Paso 5: Gratina
Espolvorea el queso rallado uniformemente.
Hornea durante 25-30 minutos, o hasta que el queso esté dorado y burbujeante.
Paso 6: Reposa y sirve
Deja reposar la cazuela durante 5 minutos antes de servir.
Esto permite que se asienten los sabores y la textura sea más firme al cortar.
Tips y Consejos para una Cazuela Perfecta
¿Te gusta el queso crujiente? Enciende el gratinador los últimos 3-5 minutos.
Agrega espinacas, champiñones o pimientos para variar la receta.
Para una versión más ligera, usa leche descremada y queso bajo en grasa.
Combina con una ensalada fresca o arroz blanco para una comida completa y balanceada.
Un plato reconfortante para repetir
Esta cazuela de verduras gratinadas es de esas recetas que llenan el alma. Nutritiva, sabrosa y tan fácil de preparar que se convertirá en un básico de tu cocina.
¡No hay mejor forma de enamorarse de las verduras que con una buena capa de queso gratinado encima!